La productora 11:11 Films & TV trabaja la sostenibilidad como un hábito cotidiano, que ya se ha vuelto parte de su cultura organizacional. Más allá de responder a las exigencias de clientes o plataformas, o tendencias para mejorar la calidad de vida del planeta, es una práctica tanto en el set como en la oficina. Julye Cuartas, productora de la compañía, es vocera no porque tenga un cargo direccionado a este tema, sino por su pasión para lograr cambios que sean significativos en la industria.

“Desde preguntarnos si es necesario imprimir tantos contratos como nos piden a veces, para incursionar en la firma electrónica, siempre manteniendo aquello que se necesite porque es una exigencia legal; hasta definir qué hacemos con todos los elementos sobrantes al concluir una grabación y pasando por cómo forjamos una red de proveedores que nos ayuden a que exista una economía circular desde diferentes enfoques de las producciones audiovisuales. En todo esto trabajamos, no porque nos lo pida alguien o sea un requisito para grabar, sino porque nos importa la salud, el medio ambiente y la calidad de vida de nosotros mismos y del entorno” explicó.

Comentó que este cambio organizacional comenzó tras la pandemia de covid-19, a partir de la reflexión que produjo toda la basura que generaron las prácticas para mantener el set y a las personas protegidas. “Recuerdo que sacamos cientos de bolsas y bolsas sólo de cubrebocas. Esto nos hizo reflexionar” dijo.

Manual de buenas prácticas ambientales

Cuartas comentó que como trabajan en Colombia y en México, han tenido la oportunidad de observar las regulaciones en el tema en ambos países. “En México no hay aún políticas tan estrictas como en Colombia, donde ya nos pidieron estructurar un manual de buenas prácticas en sostenibilidad para poder aplicar a la Ley de Cine en una de nuestras producciones. El manual debe garantizar que los proyectos sean sostenibles desde la preproducción hasta su finalización. Contempla el impacto que tendrá cualquier proyecto que hagamos sobre el entorno durante los rodajes desde cada uno de los departamentos de la producción” dijo.

Comentó que en México el proceso hacia la sostenibilidad ha sido más una apuesta de la compañía, “Hemos pedido, por ejemplo, a nuestros proveedores de catering, que no utilicen plásticos de un solo uso o cubiertos desechables. Sabemos que es un camino largo, pero estamos muy orgullosos de lo que hemos logrado, solo con que exista en nosotros esa voluntad de transformación y que con el tiempo va ganando mayor impacto en los diferentes frentes hasta convertirse en políticas de trabajo” comentó.

Explica el caso de las impresiones de contratos, que terminan convirtiéndose en un archivo muerto de miles de carpetas en cada proyecto, lo cual no hace sentido. “Creo que pensar en los pequeños detalles, hace la diferencia” explicó.

Igual ocurre con asuntos y hábitos que parecen insignificantes, como apagar la luz de oficinas y del set, cuando nadie los está usando. O cómo reciclar todo lo orgánico y hacer compost, en el caso de los residuos reciclables que pueden darles un nuevo uso o generar materias primas, o en el caso de vestuario, ver qué se puede rehusar o donar a obras sociales.

Esta actitud se vuelve realmente importante, cuando el rodaje exige trabajar en entornos frágiles. Cuartas recordó que en un set en el que trabajaron en una zona protegida de Colombia por sus condiciones de fauna, flora y bosques naturales, designaron especialmente a una persona responsable de cuidar cada detalle. “Por ejemplo, que no se lancen colillas al suelo o fuentes hídricas, parece algo pequeño, pero no lo es. Nos lo tomamos tan serio, que, si alguien lo hacía, luego teníamos una conversación con esa persona para corregir ese comportamiento y dar ejemplo” recordó.

Construir una cultura sostenible

Riéndose, Julye Cuartas comenta que ya están siendo conocidos por la seriedad con la que se toman estos temas. “Nos dicen que somos unos intensos”.

Ver cómo se le puede dar otro uso a la madera o infraestructura que queda luego de un proyecto, si se vende para recuperar inversiones o se dona a causas sociales, hasta mejorar las prácticas en áreas como maquillaje, para no desperdiciar recursos y usar productos menos dañinos para el ambiente y las personas, e insistir en el uso de vasos y botellas reutilizables, para las bebidas, como el café o el agua. Todo esto, no solo en el set, sino en la oficina. “Nos comprometemos a comunicar e informar los beneficios de estas medidas para que sean apropiadas naturalmente por todos” explicó, para luego comentar que les apasiona cuando ven estos cambios de comportamiento en las personas con las que trabajan, pues esto es lo que empieza a  marcar la diferencia hacia un verdadero futuro sostenible, no solo en el lugar de trabajo, si no en sus vidas cotidianas, familiares y personales.